¿Hasta qué punto las personas necesitan el contacto físico? Hace unos meses si alguien nos hubiera advertido de las circunstancias que estamos viviendo nos habría resultado impensable. No nos habríamos creído que pasaríamos dos meses enteros sin abrazar a nuestros amigos, sin poder ver a nuestros familiares sin una pantalla de por medio, no nos habríamos creído que estaríamos dos meses sin besar a nuestra persona amada. Y me he puesto a pensar y ¿hasta qué punto despendemos del contacto físico? Imaginad que siguiéramos en estas condiciones para siempre.
Es un hecho que el calor de un abrazo de un ser allegado es único e inigualable pero ¿por qué? ¿Os habéis parado a pensarlo? Yo creo que es una sensación de cercanía, muchas personas pueden intentar consolarte con mensajes, con audios o incluso con vídeo llamadas pero nada de esto ayudará tanto como sentir que esa persona está ahí, que está a tu lado, que no estás solo.
Yo creo que el ser humano es totalmente dependiente del contacto de los demás, y la prohibición completa de este podría llevarnos a la locura. Es inevitable sentir soledad si nos niegan este tipo de consuelo. Imaginaros este escenario: os confinan pero en lugar de estar con vuestras familias, estáis en habitaciones individuales. Tenéis vuestros medios de entretenimiento, podéis usar el móvil, ver la tele si queréis pero no tenéis la posibilidad de ningún tipo de afecto más allá del que se puede mostrar a través de las redes sociales. Y no es un día, son 60, o más.
Yo creo que se podría decir que debemos la vida a ello, a poder sentir el cuerpo de quien queremos junto al nuestro cuando estamos mal. Pasar una situación negativa completamente solo, sin ningún tipo de apoyo de nadie es muy complicado, por no decir imposible.
Ni mil palabras de amor se pueden comparar a sentir realmente el amor, que están ahí a tu lado, piel con piel.Las tecnologías hoy en día se han convertido en imprescindibles y de vez en cuando olvidamos la realidad. Un mensaje diciendo que nos quieren nos puede hacer sentir muy bien pero no hay nada como que esa persona realmente esté ahí, y que este “te quiero” salga de su boca, y no de una pantalla a todo color. No olvidemos que el mundo real es mucho más cálido e importante que el virtual.
Nada puede sustituir la epidermis humana.
Completamente de acuerdo contigo Eva. Existimos no solo como individuos, si no como parte de un colectivo y es una pena que en una sociedad tan tecnificada como la nuestra tenga que haber una pandemia para darnos cuenta de que hay vida más allá de las pantallas de nuestros teléfonos móviles. Es precisamente en la interacción con los otros cuando establecemos conexiones sociales que nos permiten reflexionar, crecer, inspirar cambios y generar confianza en nosotros mismos.